18 dic 2009

MI AMIGO EL DUENDE

a Omar Perez (El duende)
 
La arquitectura como arte tridimencional no cabe en la ausencia. Incluso desde sus inicios en los simples trazos de los proyectistas, desde el boceto esta llenando espacios imaginados. Pero a veces, toma forma humana el vacio de un inmueble, y se convierte en un solar desabitado, en ruinas abandonadas.   
 
Es lo que pasa cuando un amigo se nos escapa del horizonte, sabemos que transcurren en la distancia sus horas y ocupa su espacio lejano. Pero tan ajeno a nuestras manos, a su abrazo, a su calor y apoyo en los momentos que mas le necesitamos.
 
Unas veces es uno quien se aleja de ellos. Irremediable destino que nos fija caminos. Otras son ellos los que toman rutas opuestas. Pero siempre son amigos. Y en la amistad no cabe la distancia, ni la ausencia, ni el olvido.
 
Desde hace ya muchos años, mi amigo "el duende" comparte ademas de mis iniciales, ni apellido, mi profesion, año y mes de nacimiento, mi universidad, mi primer empleo, mis trabajos en castillos y fortificaciones Habaneras, y nuestra pasion por otras artes ademas de la arquitectura. Muchachas de nombres parecidos, lugares amados de nuestra misma ciudad y el mismo destino cuando decidimos un buen dia salir a navegar por el mundo dejando atras una isla diminuta en medio del mar caribe.
 
Me gustaria que mis poemas fuesen como sus esculturas. Mis recuerdos del pasado fueran otros, tal vez hasta igual de inolvidables, pero serian otros y otro seria yo si este duende no estuviera en mis preferidos paisajes y mis imprescindibles instantes.
 
Algo mas compartimos y recien lo descubro, hace tiempo se me habia extraviado medio corazon y en cambio medio corazon ajeno palpita en mi pecho.