ESCUELAS DE ARTE

LAS ESCUELAS DE ARTE

Las Escuelas de Arte de la Habana, han sido consideradas como una de las experiencias arquitectónicas más singulares de la segunda mitad del siglo XX. Es un conjunto de arquitectura de geometría orgánica, construido haciendo uso extensivo de la bóveda tabicada de tradición catalana. sus formas libres, expresivas e inéditas, resumieron las metáforas culturales – la fusión de los códigos de la modernidad, la tradición colonial y el rescate de la cultura negra –, representativas de la etapa "surrealista" de la Revolución. En la Escuela Nacional de Artes Plásticas de La Habana se elabora un proyecto sin precedentes que mezcla una tecnología inusual en Cuba para las cúpulas como es el ladrillo, la sensualidad del lenguaje lleno de erotismo, inspirado en los órganos reproductores femeninos, con un reconocimiento al carácter mestizo de cubanía: se mezclan elementos de la aldea africana con los portales mas europeos, la exuberancia de la naturaleza, el color, y el misterio de descubrir la arquitectura mientras se recorre. Escuelas de Artes Plásticas - Arq. Ricardo Porro Escuela de Danza Moderna - Arq. Ricardo Porro Escuela de Música - Arq. Vittorio GarattiEscuela de Arte Dramático - Arq. Roberto Gottardi

EJERCICIO DE LOS COLORES

MOMENTOS MEMORABLES DE NUESTRO PASO POR LA FACULTAD

(viñetas escritas por Alexis J. Rouco Méndez, excepto las indicadas, según sus recuerdos de antaño) Serie de la 41 a la 50 41.  Cuando en sus conferencias alguien respondía bien a una pregunta suya, el profesor de Fundamentos de la Representación, Pedro Gispert decía: "¡Bravo! ", y hacía un gesto de victoria con sus brazos. (viñeta de Noel Martínez) 42. Después de las pruebas de eficiencia física de primer año, una chica, comparaba sus puntuaciones con las de las otras y viendo que las suyas eran superiores exclamó sin mucha modestia: "Pero ¿cómo es posible? si yo fui la que más corrí, la que más planchas y abdominales hice, la que más…". A partir de ese momento algunos comenzamos a identificarla como "La quemá". (viñeta de Noel Martínez) 43. En las conferencias de Fernando Aguado siempre había tremendo relajo, hasta cantábamos las canciones del recién editado libro de Silvio "Que levante la mano la guitarra". Él sólo miraba y decía que en la prueba él se iba a reir. Yo espero que todos se recuerden de esta pregunta: "Si el cemento es rico en silicato tricálcico, ¿qué características tendrá el hormigón?" (viñeta de Noel Martínez) 44. En una clase de Introducción al Análisis Estructural, David Pérez le preguntó a la profesora Alexis Méndez algo que ella había repetido ya varias veces. Alexis le respondió: "David, usted me está tomando el pelo, y la suerte es que es usted a mí porque yo a usted no podría…" (viñeta de Noel Martínez) 45. Aunque los proyectores de diapositivas de la facultad estaban en mal estado, la verdad es que Lohania Aruca tenía una habilidad especial para romper diapos. Algunos la conocían como 'la maquinita de moler diapos'. (viñeta de Noel Martínez) 46. Lohania Aruca, durante sus primeras conferencias, cuando el aire le movía las transparencias del retroproyector, en lugar de sujetarlas, trataba de aguantar la imagen proyectada en la pared. Con el tiempo se acostumbró a calzar los acetatos con el llavero. (viñeta de Noel Martínez) 47. En una conferencia de Historia de la Arquitectura y el Urbanismo, Eliana Cárdenas quería ser tan elocuente en la monumentalidad del Focsa que dijo: "Para que ustedes tengan una idea: en ese edificio se emplearon miles de toneladas de metros cúbicos…" (viñeta de Noel Martínez) 48. En los recesos de las clases prácticas, Eloy Castro invitaba al resto del grupo a la cafetería de industrial a comer croquetas 'else print', como les llamaba, mientras José Ángel prefería llevar a la gente a "echarse un tetazo" (traducción: tomarse un té) (viñeta de Alexis J. Rouco) 49. Durante la práctica de producción de segundo año, Virna Agüero y Rosa Margarita Castillo dieron mil vueltas buscando un lugar donde cambiarse y hacer sus necesidades antes de irse. Terminaron en un rincón a donde daban las facilidades temporales de los constructores. (viñeta de Noel Martínez) 50. ¿Alguien se acuerda el dato exacto de a cuántas personas colaba Yolanda Crespo todas las mañanas en la primera parada de la 101, en la Víbora? (viñeta de Alexis J. Rouco)

MOMENTOS MEMORABLES DE NUESTRO PASO POR LA FACULTAD

(viñetas escritas por Alexis J. Rouco Méndez, excepto las indicadas, según sus recuerdos de antaño) Serie de la 31 a la 40 31.  Antes de un examen intrasemestral de la asignatura Historia de la Arquitectura y el Urbanismo I, Ariel del Risco Polls recibió la información de que el contenido que saldría en el mismo seria explicar una cultura precolombina y ejemplificarla a través de una de sus ciudades. Pues el hombre se estudió como cultura la Inca y como ciudad "El Cuzco". Cuando entra al examen y extrae su boleta queda perceptiblemente preocupado al comprobar que en la misma se pedía la explicación de la cultura Maya. Presto a responder, Del Risco se dirige a la profesora Lohania Aruca y le espeta todo lo que había estudiado de la cultura incaica. Lohania le interrumpe y le pide la boleta, y al comprobar la mentira le dice que extraiga una nueva boleta y que su calificación va en base a 4 como nota máxima. Del Risco, resignado, toma una nueva boleta y cuando la lee exclama entre aliviado y sorprendido: "¡¡El Cuzco!!". Aún es conocido este muchacho por tal sobrenombre entre los más allegados. (viñeta de Namán Morales) 32. ¿Recuerdan el carrito en que los profesores de Materiales de la Construcción llevaban las muestras a clase? Pues en una ocasión el profesor Fernando Aguado llegó a la conferencia con una sección de canalón encima de dicho carrito, dando la imagen de unos grandes manubrios. Estaba entretenido en su explicación y comenzó a balancearse rítmicamente con sus manos en los extremos del canalón. Esto le hace recordar a Alberto Molinet, una película que recién habían pasado en la televisión y exclama: "¡Flash Gordon!". El aula mira al profe y…. "se cae abajo". (viñeta de Namán Morales) 33. Cuando en primer año el grupo se reunió para escoger a la muchacha más bonita y al varón más feo para la tradicional fiesta de "La Vela", y se llegó a la elección del varón, algunos propusieron a José Vladimir López, pero "El Vlado" se defendía como gato bocarriba diciendo: "Yo soy feo, pero no soy el más feo". Pocos se percataron que mientras tanto Héctor Laguna, se hundía en su asiento para pasar inadvertido de tal trance. (viñeta de Namán Morales) 34. Cuando se hacía maratón en la Beca, escuchábamos un programa radial que se llamaba "Aún despiertos", donde se hacían preguntas a los oyentes. Los de los Cuartos 3I y 3D del Bloque 113 nos repartíamos esas preguntas por números según un orden: la 1, la 2, la 3…, pero sabíamos que siempre las últimas eran las más difíciles. José Manuel Melo se concentraba tanto en su proyecto que cuando le tocaba responder decía cualquier cosa. El programa ofrecía al final las respuestas a las preguntas y, por cada una que fuera negativa, la voz radial decía: "Le cayó carcoma." Entonces nos percatábamos de lo respondido por Melo y todos le caíamos encima para darle pescozones, mientras él a esa hora andaba 'pescando'. ¿Qué tú crees: se despertaba o no? (viñeta de Vladimir López) 35. Durante una clase práctica de proyecto en cuarto año, Aldo Ferrand necesitaba una plantilla para hacer círculos, y comenzó a pedir a viva voz: "Señores, ¿quién me presta una bolera…?" Todos se rieron, pero gracias a los más jodedores, y en clara referencia a la novela de turno en la televisión "Un bolero para Eduardo", se acuñó la frase "Una bolera para Aldo" para quedar para siempre en nuestra memoria. (viñeta de Ana Margarita Peraza) 36. En segundo año, durante una clase práctica de Proyecto II, Eloy andaba todo el tiempo sin sentarse y dando vueltas por toda el aula. El profesor Obdulio Coca le llamó la atención en varias oportunidades pero él no hacía caso. Entonces, José Ángel señaló: "Déjelo, profesor, ¿no se da cuenta de que Eloy es la ampolla, el flotante del aula?".  Eloy lo escuchó y siguió como si nada. ¡Claro, si era la ampolla tenía que estar en el 'floting'! (viñeta de Ana Margarita Peraza) 37. Luego de un examen de Materiales de la Construcción, casi todos salimos con 2. Le hicimos una reclamación al Decano, y una vez presentado el mismísimo Rubén Bancroft en el aula de conferencias ante todos los alumnos, se le plantean como argumentos que las clases de Fernando Aguado no se entendían, que él no explicaba bien, etc., a lo que el Decano respondió: "¿De quién están hablando mal, del Candidato a Doctor en Ciencias Fernando Aguado Crespo? ¿El que además fue mi profesor?" Por supuesto ahí mismo terminó nuestra reclamación y nos quedamos con el 2. (viñeta de Francisco Gutiérrez) 38. En muchas ocasiones, en los largos y agotadores maratones para las entregas, el tiempo escaseaba y el hambre campeaba, por lo que los albergados nos rifábamos quien iba a buscar pizza a la cafetería. Ariel del Risco y Fernando Corona, cansados de que le tocara repetidas veces, decidieron poner unas cuantas ramas, piedras, colillas, etc. dentro del queso, para darle un "mejor sabor"… Como referencia adicional, este hecho fue repetido después en varias ocasiones (por otros). (viñeta de Fernando Corona) 39. En una clase práctica de la asignatura Materiales de la Construcción, impartida por el profesor Fernando Aguado, éste mostraba un ladrillo de elaborada terminación y color blanco, explicando exhaustivamente las cualidades del mismo como material para usar en muros a vista. Roberto Fernandez Méndez, más conocido por su último apellido, grita: "¡Profe, eso es poliespuma¡". El  profesor, con la mayor calma del mundo y haciendo gala de su bien ganada fama de flemático, repite completamente la explicación. Se hace un silencio, y de nuevo: "¡Eso es poliespuma¡". Por increíble que parezca, el profesor ofrece una nueva explicación, pero: "¡Poliespuma!". Aguado, al darse cuenta que lo estban trajinando, le lanzó aquel ladrillo a Méndez, el que fue a dar contra la pared del fondo del aula gracias a que el estudiante se agachó a tiempo. El viejo le dijo entonces con naturalidad: "¿Ve que no es poliespuma?". (viñeta de Namán Morales) 40. El profesor de Cálculo I, Bonet, era un tipo serio y de carácter muy seco, por lo que sus comentarios para los estudiantes de primer año eran siempre impredecibles. En un examen de Geometría Descriptiva, donde debía dibujarse un cuerpo en revolución en una vista tridimensional y rellenarlo, mientras él recorría el aula viendo lo que los estudiantes hacían, se detuvo junto a uno observarlo. El estudiante al darse cuenta, no dejaba de sombrear el cuerpo dibujado, y luego de varios minutos en que ninguno de los dos hizo el menor gesto de cambio, el profesor exclamó: "Rouco, se le va gastar la mina…"

FOTOS DE LA CUJAE (ISPJAE)

MOMENTOS MEMORABLES DE NUESTRO PASO POR LA FACULTAD

(viñetas escritas por Alexis J. Rouco Méndez, excepto las indicadas, según sus recuerdos de antaño) Serie de la 21 a la 30 21.  En tercer año, durante una conferencia sobre los centros poli funcionales, al profesor se le ocurre preguntar: "¿Dónde está el centro poli funcional más grande del mundo?". Uno de los estudiantes respondió: "En los Estados Unidos", a lo que el conferencista dice: "Muy bien, pero ¿cuál es?" Otro estudiante le responde: "El Empire State". El conferencista dice: "No es el Empire State, pero está a dos cuadras de ahí". Entonces, a un tercer estudiante se le ocurre preguntar, cómo si conociera el lugar: "Pero, ¿a dos cuadras a la derecha o a la izquierda?". El conferencista, que no era otro que un sorprendido Roberto Segre, no le quedó más remedio que bajar del podio muerto de risa y, por supuesto, en esa clase no volvió a preguntar nada más. (viñeta de Amanda Adato) 22. Debía comenzar un turno me Cálculo I, en primer semestre de primer año, pero el profesor Bonnet no había llegado al aula. Un grupo de becados bajamos al Bunker de Arquitectura, donde había un piano. Pepe Frías comenzó a tocar algunas piezas musicales que nosotros le íbamos pidiendo. Cuando estábamos muy relajados, llegó Bonnet y se puso a escuchar la melodía. Cuando Pepe termina, el profesor le pide una canción. Todos nos quedamos fríos, pero Pepe lo complace. Al terminar, el profesor dice: "Pepe tiene 5 puntos, el resto tiene 2 puntos". Ese día quedó para la historia como "La balada de Cálculo I"… (viñeta de Vladimir López2) 23. En primer año, luego de una visita de Diseño Básico II al Hotel Marazul, en Santa María del Mar, un grupo de estudiantes se fue a la playa a darse un chapuzón. Ya en el agua se pusieron a hacer cuentos sobre temas sexuales… y hubo quien no pudo salir del agua en un buen tiempo. 24. En el segundo semestre de tercer año, en una entrega con Gottardi, Rafael Muñoz tuvo que entregar un plano trapezoidal (faltando un tramo) porque se le había acabado el papel alba… mientras que en su mismo equipo Alexis Rouco entregaba una fachada de los edificios de su manzana en un plano que tenía un metro y medio de largo. 25. En una conferencia de Técnicas de la Construcción, en tercer año, había una algarabía enorme en el aula, un ruido donde era imposible escucha lo que decía el profesor Pi, el que luego de un buen rato, dijo a modo de comentario: "Siento un leve murmullo…" 26. En una conferencia de Historia de la Arquitectura y el Urbanismo I, la profesora Marimí hablaba de las edificaciones europeas de siglos anteriores cuando, de repente, preguntó curiosa a los estudiantes: "¿Alguno de ustedes ha estado en París?" 27. Dentro de la amistosa y a veces pesada competitividad entre los albergados de nuestro año y del año inferior, una noche los otros nos cerraron la puerta del albergue con clavos y cadenas. Ante esta situación, todos decidimos seguir durmiendo, aún teniendo un examen de curso, sólo Francisco Alcalá entró en pánico y empezó a gritar que se moría, que padecía de claustrofobia y que aquello era un atentado a los medios de la universidad. Entonces David Pérez le gritó: "¡Coño, Alcalá, duerme y no jodas más!". (viñeta de Fernandito Corona) 28. En un examen oral de Historia de la Arquitectura y el Urbanismo III, en cuarto año, Roberto Segre le pregunta a Fernando Corona: "¿Qué otra obra en la capital tiene las torres y el mismo estilo que el Hotel Nacional?". "No sé, profesor". Y al decirle Segre que era la Terminal de Trenes, Fernando dijo: "¡Ah, sí, si yo tomo la guagua siempre al frente…! y entonces el profesor exclamó: "¡Coño! ¿Y tú andas por el mundo sin mirar para arriba? ¡Tremendo futuro arquitecto!". (viñeta de Fernandito Corona) 29. Luego de devolver los planos evaluados, el profesor de clase práctica del grupo 4, Rubio, preguntó: "¿Quién es Guada Glez?", a lo que Guadalupe González respondió que era ella. El profesor, algo molesto, le dijo: "¡Usted no se llama Guada Glez sino Guadalupe González!". Guadalupe refutó: "¡Pero profe, es que mi nombre es muy largo y no cabe en un renglón!". Rubio cambió de colores varias veces hasta quedar rojo de furia, y luego de buscar las palabras adecuadas, dijo: "¡Pues lo escribe en tres renglones si es preciso! ¡Que Guada Glez ni Guada Glez!". Pero después de pensar mejor gritó muy enojado: "¡¡¡Y mi asignatura se llama Introducción a las Técnicas de la Construcción, y no Int a las Tec de las Const como puso en el plano!!! ¡¡¡Si lo vuelve a hacer tiene dos!!!" 30. Miranda quiso conservar los recuerdos de lo que habíamos hecho durante la práctica laboral de segundo año en Alamar, y para ello hizo foto de cuanto acontecimiento valiera la pena. Al final del período, todo el grupo acordó hacerse una foto en la entrada de una planta de prefabricado y Lina Alba se ofreció como fotógrafa. Luego de estar todos acomodados y con la distancia recomendada para que cupiesen en la imagen, Lina, sin moverse un milímetro de donde estaba, comenzó a decir a los que estaban a la derecha: "Ustedes no salen, deben correrse más para dentro". La gente se apretó un montón buscando aparecer en tan valioso recuerdo, pero Lina volvió a la carga: "Todavía no caben, deben apretarse más". Luego del segundo apretón y a una tercera indicación de la fotógrafa similar a las anteriores, el grupo decidió que daba igual, que tirara la foto y que saliera como saliera, pues ya llevaban como media hora en la gracia aquella y que estaban cansados. Cuando Miranda, muy ilusionado con su obra, reveló el rollito apareció una foto de la izquierda de una entrada parcialmente vacía, mientras que unas 500 personas estaban apiñadas unas sobre otras en un pequeño fragmento del extremo opuesto.

MOMENTOS MEMORABLES DE NUESTRO PASO POR LA FACULTAD 2

(viñetas escritas por Alexis J. Rouco Méndez según sus recuerdos de antaño) Serie de la 11 a la 20 11.   Aún nadie sabe por qué Eloy Castro confundía los nombres dobles y le llamaba al profesor de conferencia de Proyectos III y IV López-Serrano, mientras que al edificio que está en L y 15, en el Vedado, le decía el González-Romero. 12.  En todas las clases de taller, cuando había silencio absoluto, Rafael Muñoz siempre le hacía a Mariíta la misma pregunta: Mariíta, ¿es verdad que en tu pueblo las películas del sábado por la noche ustedes la ven el domingo por la mañana? 13.  ¿Recuerdan a quién le decíamos Tina Turner? ¡A Odelaisy Diet Cañet! 14.  En tercer año, durante el desarrollo de un ejercicio práctico en un taller de Clima del grupo 4, y en pleno silencio, la profesora Alba Alemany, de manera explosiva, mandó a callar a Irma García; cuando ésta, muy sorprendida, le respondió: Disculpe profesora, pero yo no estoy hablando, Alba, al ver que se había equivocado, le respondió: ¡Ah! ¿no?, bueno, pues no importa, de todos modos usted habla en conferencias, cállese igual. 15.  Cuando la profesora Eliana Cárdenas, en una conferencia de Historia de la Arquitectura y el Urbanismo II, luego del receso intermedio, pasó la lista donde habían firmado los estudiantes durante el primer turno, preguntó tranquilamente: ¿Quién es Agustín Marquetti? 16.  En una conferencia de Fundamentos de la Representación en primer año, el profesor Pedro Gispert ante una respuesta totalmente equivocada de un estudiante a una pregunta hecha por él, dijo enérgicamente: ¡Tiene cero!, a lo que un estudiante aún no identificado pero que yo creo que fue Lina Alba respondió: Pero ¿a nosotros no nos dijeron que la nota más baja que podían darnos en la universidad era dos? 17.  En segundo año, durante algún tiempo, el Grupo 3 tuvo como profesora de Inglés a una rusa, a la que los estudiantes llamaban la profesora de ruso, ¿se acuerdan?, mientras que al Grupo 4 le impartía una profesora de avanzada edad, muy gruesa, cuyo nombre no recuerdo porque todos la llamaban Olivia (por la Newton-John) por su desplazamiento… la que sufría enormemente cuando no funcionaba el ascensor. 18.  Cuando el profesor Orozco, profesor de clase práctica de la asignatura Fundamentos de la Representación, del Subgrupo 8 de primer año, aquel que "inicialaba" nuestros planos, salía del aula, ¿quién nos explicaba los ejercicios de la signatura, nos orientaba lo que teníamos que hacer, y nos revisaba lo que habíamos hecho ya?: Rafael Muñoz. 19.  Durante un maratón de segundo año, en casa de Laudelina Landín, en el paradero de Playa, cuando Ana Margarita Peraza y Alexis Rouco fueron a buscar suministros alimentarios a La Cocinita hallaron decenas de tachuelas plásticas de colores dispersas por el suelo, y acto seguido comenzaron a recogerlas vociferando: ¡Puntos de fuga, mira cuantos puntos de fuga! Por supuesto, la gente que pasaba por allí a esa hora (11:30 pm) pensó que nos faltaban una pila de tornillos… 20. ¿Por qué llegaban juntos y tarde a todos los turnos de las 7:30 am: Miranda, Tatiana Pino, Matuti, Yoyi, Roberto Benítez…los de Santiago de las Vegas? Profe, ahora fue que pasó la 35…

IMAGENES MEMORABLES

MOMENTOS MEMORABLES DE NUESTRO PASO POR LA FACULTAD

(viñetas escritas por Alexis J. Rouco Méndez según sus recuerdos de antaño) Serie de la 1 a la 10 1. En un taller de Proyecto IV, en tercer año, el profesor Roberto Gottardi le revisaba la solución a María Caridad Soto, más conocida por Mariíta o Cachita, cuando al proponerle éste una variante diferente a la propuesta por ella, Mariíta le respondió muy enfadada: "¡No profesor, eso que usted me dice es una mierda!" 2. En un taller de Dibujo Técnico Aplicado, en segundo año, José Ángel Vega le solicitó dos veces seguidas a la profesora María Elena Martín: "Profe, por favor, venga acá", sin apartar los ojos de lo que estaba haciendo en ese momento, a lo que ella le respondió en ambas oportunidades: "Enseguida voy, Vega". Como las respuestas de la profesora Vega no las escuchó, entonces él le espetó de manera enérgica: "¡Coño, profe, le dije que venga acá!", y ella se erizó: "¡VEGA!". 3. En la Práctica Laboral de segundo año, en Alamar, al final de una jornada, el profesor Geonel se marchaba en un transporte que había resuelto. Mariíta (siempre Mariíta) le gritó desde una escalera del quinto piso del edifico en construcción: "Profe, ¿pa' Santa Cruz?", a lo que Cecilia Núñez le contestó a plena voz: "¡Profe, pa' Jaruco!". Sin comentarios. 4. En la Práctica Laboral de segundo año, en Alamar, Rolando Segura y Omar Pérez eran los especialistas en colocar interruptores e tomacorrientes en los apartamentos. 5. En un mural donde trabajaba el equipo de tesis que tutoraba Lourdes Ortega en el local del tercer piso, Teresa Luis escribió: "¿Quién dijo que todo está perdido? Yo vengo a ofrecerles mi opinión." 6. En un taller de Proyecto IV, en tercer año, del profesor Roberto Gottardi, a una pregunta de Rafael Muñoz a Teresa Luis sobre dónde estaban los elementos estructurales del sistema prefabricado SAE de su propuesta, ella le respondió con mucha naturalidad que en la cimentación, por supuesto. 7. Nadie se acuerda que Rafael Muñoz fue uno de los precursores de la arquitectura post-hidráulica cuando hizo su diseño de edificio de viviendas del taller de Proyecto II que dirigía el profesor Obdulio Coca. 8. En un taller de Dibujo Técnico Aplicado, en segundo año, la profesora María Elena Martín le dice a Alexis Rouco luego de ver el Poster que éste iba a entregar para su evaluación: "¡Rouco, esta perspectiva está salvaje!". 9. El día en que los estudiantes del taller de Proyecto II que dirigía el profesor Obdulio Coca fueron a recoger sus notas, el profesor le dijo a Alexis Rouco: "Bueno, tú sabes tu nota ¿no? Pero, sabes, no encontré dónde pusiste la maqueta del proyecto". "No la entregué, profe" fue la respuesta de Alexis. 10. ¿Se acuerdan cómo le decíamos a aquel viejo apestoso que asistía puntualmente a todas las conferencias que programó el profesor Roberto Gottardi en la Sala Teatro del Museo Nacional de Bellas Artes en el ciclo 'Mi experiencia como creador' durante el tercer año de la carrera? ¡Stanislavski!